La chispa que encendió la mecha
La tensión nuclear entre India y Pakistán alcanzó niveles críticos este miércoles con ataques aéreos que dejaron al menos 26 muertos. La llamada “Operación Sindoor” marca un nuevo capítulo en el conflicto por Cachemira, una herida abierta desde 1947.
El detonante
Todo comenzó con el ataque del 22 de abril en Pahalgam, donde 26 turistas (25 indios y 1 nepalí) fueron asesinados por extremistas. India responsabilizó a Pakistán, aunque este niega cualquier vinculación. “Perseguiremos a los culpables hasta el fin del mundo”, advirtió el primer ministro Narendra Modi.
Los bombardeos
En la madrugada del miércoles, aviones indios atacaron nueve posiciones en:
- Muzaffarabad (Cachemira administrada por Pakistán)
- Kotli (Cachemira administrada por Pakistán)
- Bahawalpur (Punjab paquistaní)
India afirma que eran “infraestructuras terroristas”, mientras Pakistán denuncia ataques a zonas civiles.
La respuesta paquistaní
Islamabad no se quedó con los brazos cruzados:
- Derribó 5 aviones y 1 dron indios según su versión
- Reportó 10 muertos en territorio indio
- Prometió que el ataque “no quedará impune”
¿Por qué Cachemira es clave?
Esta región es el epicentro de tres guerras y numerosos enfrentamientos:
- 1947: Primera guerra indo-pakistaní
- 1965: Segunda guerra por el territorio
- 2019: Crisis tras ataque en Pulwama
La zona sigue siendo un polvorín donde cualquier chispa puede desatar el caos.
La comunidad internacional en alerta
Con ambos países armados nuclearmente, el mundo observa con preocupación:
- ONU pide “máxima moderación”
- EE.UU. espera que los combates “terminen pronto”
- Diplomáticos intentan mediar para evitar una escalada mayor
Mientras los misiles cruzan el cielo de Cachemira, una pregunta flota en el aire: ¿Estamos ante el preludio de algo peor? Mantente informado con N24, donde la geopolítica se explica sin filtros.













