China está a la vanguardia de la transición hacia una economía sostenible, con impresionantes avances en tecnologías verdes que podrían tener un impacto global. Más de la mitad de los nuevos autos vendidos en China son eléctricos o híbridos, gracias a una caída dramática en los precios de los vehículos eléctricos nacionales. Asimismo, la energía solar se ha vuelto cada vez más asequible, y China lidera la tecnología de baterías.
Sin embargo, la política comercial de Estados Unidos y Europa amenaza con frenar este progreso verde. Los altos aranceles a las importaciones de productos chinos como paneles solares y baterías podrían obstaculizar la transición energética mundial. Una solución sería que China canalice más inversión extranjera directa hacia proyectos de energía limpia en economías avanzadas, lo que reduciría los costos y aceleraría la transformación.
Pero esta estrategia podría verse comprometida por las preocupaciones de seguridad nacional de Estados Unidos, que podrían prohibir la tecnología china en vehículos “conectados”. Esto representaría un duro golpe tanto para la economía global como para la agenda de sostenibilidad.
A pesar de estos desafíos, el liderazgo de China en la innovación verde sigue siendo un factor clave para la transición hacia un futuro más sostenible. ¡Mantente informado sobre esta fascinante evolución en la N24, tu fuente de noticias de vanguardia!
