¿Alguna vez has notado que los mangos están llenos de manchas negras? Es muy probable que todos nuestros lectores se hayan percatado de esto, ya sea porque adquirieron un par de frutos con estas características o porque, después de un tiempo de almacenarlos en el frutero, estos comenzaron a llenarse de peculiares manchas negras de diferente tamaño.
Comúnmente este defecto es una señal de que el alimento se ha deteriorado, pues la aparición de esta característica viene acompañada de un cambio en la textura, ya que estos se ablanda, así como del olor y sabor, pues estas agradables propiedades del fruto, por las cuales son tan apreciados para el consumo humano, se convierten en desagradables. Todo esto en su conjunto hace que la mayoría de las personas prefieran prescindir de estos alimentos y desecharlos.
Seguro que ya has recordado la sensación de observar que los mangos del frutero de tu cocina ya se han deteriorado, pero, a pesar de que esto nos es tan familiar… ¿Sabemos en realidad por qué le sucede esto a los frutos y qué podría pasar si consumimos un mango en este estado? En esta nota resolveremos estas dudas, así que, sin más preámbulo, veamos todos los detalles.
¿Qué son las manchas negras de los mangos?
Las manchas negras que observas en los mangos son una síntoma que indica que estos frutos están infectados con un hongo del género Colletotrichum, así como lo leíste, esta es una señal de infección fúngica que se conoce comúnmente como antracnosis.
La antracnosis es una de las enfermedades más importantes que ataca al mango y la que genera grandes pérdidas en los cultivos, sobre todo durante la postcosecha (almacenamiento y transporte), limitando la producción al ocasionar gran pérdida de frutos.
Este tipo de hongos es capaz de afectar hojas, flores y frutos, teniendo un mayor efecto en estos últimos. De manera general, la infección se produce tras la dispersión de esporas, una forma de vida de estos hongos microscópicos, a través de salpicaduras de agua, requiriendo de elevada humedad ambiental para su desarrollo, como la que se encuentra típicamente en los cultivos de estos frutos; de hecho, esta condición es el principal detonante de la antracnosis.
Según se describe, la infección comienza latente en el fruto inmaduro y se desarrolla cuando este comienza a alcanzar el estado de madurez óptimo para el consumo humano, lo que implica que cuando llega a los supermercados para su venta, algunos ejemplares ya muestren el síntoma típico de enfermedad, es decir, esas manchas oscuras de diferentes tamaños. Asimismo, esto explica el porqué mientras los mangos maduran en el frutero de nuestro hogar, este desperfecto comienza a aparecer.
¿Qué pasa si consumimos mangos en este estado?
Si tienes duda sobre si consumir un mango en este estado podría generar una infección fúngica en humanos, la respuesta corta es que no, este hongo es fitopatógeno, esto quiere decir que solo son capaz de infectar a las plantas.
No obstante, la presencia de esta infección propicia que el deterioro de los frutos sea mucho más rápido y su consumo sea menos seguro para los humanos, además de que su aparición está acompañada de un cambio en la textura y sabor que no son óptimas para el consumo humano.
