Estados Unidos y México se unen en una estrategia audaz para frenar el flujo de armas que alimenta la violencia de los cárteles. El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, reveló los detalles de este esfuerzo conjunto en una entrevista exclusiva.
“Ellos (el gobierno mexicano) nos están pidiendo que los ayudemos a mantener las armas fuera de las manos de estos cárteles”, afirmó Rubio. “Muchos de estos cárteles están encontrando formas de comprar armas o lo que sea en Estados Unidos, y regresan por el otro lado”.
Para abordar este desafío, Rubio explicó que el gobierno de EE.UU. está trabajando en un plan con México. “Vamos a trabajar juntos. Ellos en su lado de la frontera, nosotros en nuestro lado de la frontera, para que podamos ocuparnos de su problema de tráfico de armas, ocuparnos del problema del fentanilo y del problema de la migración masiva y del problema de los cárteles”.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, y la fiscal general, Pam Bondi, se han unido al equipo de Rubio para implementar esta estrategia fronteriza integral. “Tenemos un buen equipo y los mexicanos tienen un gran equipo”, afirmó Rubio, expresando optimismo sobre los resultados.
Además, Rubio enfatizó que Washington ha pedido a México que “tomen más medidas” para detener el tráfico de drogas y la migración ilegal. Esta colaboración bilateral busca abordar los desafíos de seguridad que afectan a ambos países.
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