Mientras que el nuevo coronavirus ha dejado sin empleo a millones en Estados Unidos, la fortuna de los multimillonarios estadounidenses creció en 282 mil millones de dólares, casi un 10 por ciento, según estimaciones del Instituto de Estudios de Política (IPS) de Estados Unidos. El que más se ha beneficiado durante la pandemia ha sido el fundador y director ejecutivo de Amazon.
Ciudad de México, 3 de mayo (AP/RT/SinEmbargo).– En medio de la pandemia del nuevo coronavirus, entre el 18 de marzo y el 10 de abril de 2020 más de 22 millones de personas perdieron su trabajo y la tasa de desempleo creció hasta un 15 por ciento, mientras que la fortuna de los multimillonarios estadounidenses creció en 282 mil millones de dólares —casi un 10 por ciento— durante el mismo período, según estimaciones del Instituto de Estudios de Política (IPS) de Estados Unidos.
El reciente estudio del organismo concluyó que el fundador de Amazon, Jeff Bezos, así como Bill Gates y Warren Buffet “siguen poseyendo tanta fortuna como la mitad inferior de todos los hogares de EE.UU. juntos”. “Entre tanto, se estima que un 78 por ciento de los hogares viven de sueldo a sueldo, mientras que un 20 por ciento tiene un patrimonio neto nulo o negativo”, señalaron los investigadores.
Ocho multimillonarios —Jeff Bezos, Elon Musk, MacKenzie Bezos, Eric Yuan, Steve Ballmer, John Albert Sobrato, Joshua Harris y Rocco Commisso— han aumentado su patrimonio neto en más de mil millones de dólares entre el 1 de enero y el 10 de abril, indicó el instituto.
El que más se ha beneficiado durante la pandemia ha sido el fundador y director ejecutivo de Amazon. Para el 15 de abril la fortuna de Bezos se incrementó en 25 mil millones de dólares desde el inicio del año, mientras que para el 10 de abril sus ganancias constituían más de 10 mil millones.
“La riqueza de los multimillonarios ha crecido asombrosamente en las últimas décadas y para algunos ‘especuladores de la pandemia’ incluso más drásticamente desde la crisis del covid-19, aún cuando las obligaciones fiscales de los multimillonarios han caído en picada”, resume el informe.
A falta de reformas fiscales y supervisión a corto y largo plazo “la ‘condición preexistente’ de extrema desigualdad de EU.” no solo podría abrumar a la economía del país, sino que también a la democracia, opinan los autores del estudio.
DESEMPLEO EN EU
Apenas el 30 de abril se dio a conocer que más de 3.8 millones de trabajadores recién despedidos en Estados Unidos solicitaron beneficios por desempleo a medida que la economía del país se hunde aún más en una crisis que se está convirtiendo en la más devastadora desde la Gran Depresión de la década de 1930. La cifra significa que más de uno de cada seis trabajadores estadounidenses no tiene empleo.
Ahora suman aproximadamente 30.3 millones de estadounidenses que han solicitado ayuda por desempleo en las seis semanas desde que el nuevo coronavirus que causa el COVID-19 comenzó a obligar a millones de empleadores a cerrar sus negocios y recortar sus fuerzas laborales.
Esa cifra supera la de las personas que viven en las áreas metropolitanas de Nueva York y Chicago combinadas, y es, con mucho, la peor serie de despidos registrados hasta ahora.
A medida que más empleadores recortan sus nóminas para ahorrar dinero, los economistas han pronosticado que la tasa de desempleo para abril podría llegar al 20 por ciento. Esa sería la tasa más alta registrada desde la de 25 por ciento durante la Gran Depresión.
El Gobierno de Donald Trump calculó la semana pasada que la economía se contrajo a una tasa anual de 4.8 por ciento en los primeros tres meses del año, la caída trimestral más marcada desde la crisis económica de 2008. Aun así, es probable que el panorama empeore mucho más: Se espera que la economía se contraiga en el trimestre de abril-junio a una tasa anual de hasta 40 por ciento. Ningún trimestre anterior había sido tan débil desde que el Gobierno empezó a obtener tales cifras después de la Segunda Guerra Mundial.
En una entrevista con El País publicada hoy, el ensayista Alejandro Horowicz reflexiona sobre el capitalismo: “Entonces, cuando hablamos de los mercados no hablamos de ninguna otra cosa que del sistema financiero internacional. Y cuando hablamos del coronavirus, de lo que hablamos es del efecto que una gramática mercantil que se extiende sobre todo, produce como efecto destructivo sobre todo. Yo no soy un infectólogo, no soy médico y no pretendo dar lecciones de aquello que ignoro, ni mucho menos. No sé cómo se combate específicamente esta pandemia, pero sé como se combate el sistema y la lógica de las pandemias. Es decir: si los mercados siguen regulando la producción, y el planeta Tierra se explota como una especie de granja sin límites, donde el único concepto de los mercados, que es la rentabilidad, puede destruir todo, incluido el mercado, lo van a hacer. Sin ninguna duda”’.
Agrega: “Entonces, zafemos o no zafemos del coronavirus, la pregunta es qué se hace con el virus del capitalismo. Ese es un virus altamente peligroso”.