Conmoción en Líbano: El poderoso grupo islamista Hezbolá anunció el fallecimiento de uno de sus principales comandantes militares, Ibrahim Kobeisi, en un ataque israelí en los suburbios del sur de Beirut. Este golpe se produce en medio de una escalada de violencia entre Israel y el movimiento proiraní, que ha desplazado a casi medio millón de libaneses.
Según el comunicado de Hezbolá, el “comandante Ibrahim Mohamed Kobeisi” murió junto a otras seis personas en el ataque israelí del martes. Previamente, tanto fuentes cercanas al grupo como el ejército israelí habían confirmado su deceso.
La tensión se intensificó aún más cuando una fuente de seguridad libanesa reveló que las fuerzas israelíes bombardearon la zona de Saadiyat, cerca de Beirut, horas después del ataque que cobró la vida de Kobeisi. Testigos presenciales en la capital libanesa reportaron haber escuchado una fuerte explosión.
“Líbano está al borde del abismo”, advirtió el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, en la apertura de la Asamblea General de Naciones Unidas. La inquietud por esta escalada entre Israel y Hezbolá, aliado del grupo palestino Hamás, dominó los debates.
Tras los recientes ataques israelíes que dejaron al menos 558 muertos, el ministro de Exteriores libanés, Abdallah Bou Habib, reveló que la cifra de desplazados en el país ha alcanzado casi los 500.000. Una situación humanitaria devastadora que agrava aún más la crisis en la región.
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