Luego de que se diera a conocer por Grupo Reforma el presunto desvío millonario que estaría haciendo el líder de la Sección 50 del SNTE en la sultana del norte, más de uno comenzó a temblar Y no solo en la sección de los profesores, sino también en el ISSTELEÓN.
Y es que como decía Doña Wendy, resulta y resalta harto sospechosismo en los manejos de los dineros de los profes, pues los señalamientos indican que además de otorgar contratos millonarios a “changarritos” acusados de factureros, también le está pagando millones en “insumos” a la empresa del líder nacional del SNTE, mismo que operó fuerte desde CDMX para que “Juan Jo” ganara la elección.
Y es que apenas pasó el año pasado el curioso triunfo de la planilla naranja, y decimos curioso y dudoso, en tanto que aún no resuelve la autoridad la querella emitida por el resto de planillas que acusan de fuertes irregularidades, y sin salir de esa ya se metió en otra.
Y aunque uno no quiera pensar mal, pues todo parece indicar que le salió muy cara esa llegada al SNTE, quizá su juventud le traicionó al no poder orquestar una operación cicatriz que le permitiera transitar tres años de manera cómoda, y decimos cara porque no son 2 o 5 millones lo que supuestamente está desviando mensualmente, sino porque son más de 121 millones cada 30 días en pagos al hijo del líder nacional. ¡Bolas don Cuco!
¿Será pura casualidad o le estará pagando algo?
Y para cerrar con broche de oro, nos dicen a Sin Chayote que en días pasados el joven líder de la sección 50 fue llamado en calidad de urgencia por el Secretario de Gobierno de Nuevo León donde tuvo una encerrona. ¿Le habrá pedido cuentas? ¿Lo regañaron? ¿Le buscarán una salida digna? Al baile vamos…
Por lo pronto, tienen harta tarea los profes en Nuevo León, a ver si no los reprueban en ingenuidad.
Es cuanto, señor presidente.
