Francisco García Cabeza de Vaca, gobernador de Tamaulipas, en febrero en la Cámara de Diputados. Fotógrafo Especial / Fotógrafo Especial
Morena ha arrasado en Tamaulipas. La alianza del partido del presidente Andrés Manuel López Obrador y el Partido del Trabajo (PT) ha tomado ventaja y todo indica que se llevará los Ayuntamientos más importantes y 16 de las 22 diputaciones del Congreso estatal, según los resultados preliminares. El principal perdedor con el nuevo equilibrio de fuerzas es el gobernador, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, que fue acusado de delincuencia organizada y lavado de dinero. El mandatario no ha enfrentado a la justicia gracias al espaldarazo de la anterior legislatura, controlada por el Partido Acción Nacional (PAN), al que pertenece. El triunfo de Morena esboza un panorama completamente distinto en el Estado fronterizo con Texas, uno de los focos rojos de la violencia en el país.
El caso contra Cabeza de Vaca ha provocado un encontronazo político. El presidente lo ha llamado “delincuente confeso”, mientras que el gobernador acusa una “persecución política”. La Fiscalía General de la República, al frente de las investigaciones, busca su captura desde hace meses. La Cámara de Diputados dio luz verde a su desafuero, lo que lo despojaría de su inmunidad al estar en un cargo de elección popular. El bloque gobernante ha amagado con la desaparición de poderes en el Estado. Y en la recta final de la campaña, Mario Delgado, el líder de Morena, acusó que había sido interceptado por hombres armados y responsabilizó a Cabeza de Vaca por lo sucedido.
El muro de contención del mandatario tamaulipeco fue el Congreso estatal, que en mayo pasado promovió una controversia constitucional y no aprobó que fuera desaforado, al argumentar que se violaba la “presunción de inocencia” y sus derechos humanos. La Suprema Corte hizo un pronunciamiento confuso sobre el recurso: lo desechó, pero no invalidó el rechazo de los legisladores panistas en Tamaulipas de seguir con el proceso de desafuero. Las sospechas sobre Cabeza de Vaca, uno de los gobernadores que más ha chocado con López Obrador, también han aparecido en Estados Unidos por ingresos que no ha comprobado y posibles vínculos con el crimen organizado.
Han sido meses de choques, que pueden adoptar un destino distinto con la nueva composición de la Cámara de Diputados local. El PAN, que había tomado Tamaulipas como bastión tras el dominio histórico del Partido Revolucionario Institucional (PRI), logró más de 495.000 votos y mantendrá seis diputaciones, de acuerdo con el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), con el 100% computado. La coalición de PT y Morena se hizo de casi 542.000 sufragios, pero representará a 16 distritos, según el PREP.
El retroceso del PAN, el partido opositor con más votos a nivel nacional, es patente. La legislatura anterior tenía 21 de 22 bancas posibles en el Congreso de Tamaulipas. Tres años antes contaba con 16 y se había acostumbrado a formar un bloque entre el Ejecutivo y el Legislativo que prácticamente no tenía oposición. La derrota se amortigua si se observan los resultados para las alcaldías. Los panistas han retenido 28 de 43 Ayuntamientos. Pero la alianza opositora se hizo de 10 presidencias municipales, entre ellas la capital, Ciudad Victoria, y las ciudades fronterizas de Matamoros, Río Bravo y Reynosa. El PRI se quedó con cuatro alcaldías y una candidatura independiente con otra más. Falta todavía que se presenten las cifras definitivas, pero los números preliminares apuntan a que Morena también se quedará con la mayoría de las nueve diputaciones federales del Estado.
Cabeza de Vaca termina su mandato en 2022, pero la nueva Legislatura puede homologar el proceso de desafuero que ya fue aprobado el mes pasado en el Congreso federal y desatorar el inicio del proceso judicial en su contra. Tras compartir una publicación mientras votaba en una casilla de Reynosa, el gobernador no se ha pronunciado sobre las elecciones en sus redes sociales ni tampoco se ha emitido un comunicado en las cuentas oficiales del Gobierno. Este lunes se dio a conocer otro capítulo del caso contra el mandatario. Dos cuentas bancarias de su esposa, Mariana Gómez Leal, fueron liberadas por orden de un juez, después de que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) las congelara en seguimiento a la investigación de la Fiscalía.
También se levantó la suspensión de tres cuentas del hermano del gobernador, José Manuel. La UIF congeló en mayo las cuentas de 12 personas del círculo de Cabeza de Vaca y de 25 entidades financieras relacionadas con su caso. El brazo de la Secretaría de Hacienda contra el blanqueo de dinero dijo que no ha sido notificada del fallo y mantendrá el bloqueo bancario, según el periódico Milenio. Mientras tanto, aunque Tamaulipas no eligió este domingo un nuevo gobernador, las miradas se centran en el futuro del Ejecutivo.
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