Cuando pensamos en la nueva generación lo primero que nos viene a la cabeza es un avance tecnológico. Mejores gráficos, tiempos de carga reducidos, más imágenes por segundo, pero que el salto se quede sólo en eso sería decepcionante.
De entre todas las mejoras con las que uno sueña para máquinas como Xbox Series X, los cambios de interfaz y accesibilidad son uno de los puntos que necesitan una buena mano de chapa y pintura. Una evolución que en Microsoft parecen tener ya más que interiorizada.
Bajo el nombre de Project Mercury, Windows Central ha dado a conocer gran parte de ese cambio que se avecina para Xbox One y Xbox Series X con una sustancial mejora de la tienda de Xbox. El nuevo diseño, que difumina aún más la separación entre la app de PC y las consolas de Microsoft, apunta a ser más cómodo, rápido y limpio.
Centrada en la funcionalidad más que en el espectáculo -se acabaron esos tráiler que ocupan toda la pantalla cuando lo único que quieres es darle a instalar-, la nueva interfaz también se encarga de acelerar y facilitar el acceso a todas esas bazas con las que ya cuenta la actual Store, desde los filtros hasta los análisis de usuario.
Sin fecha de publicación en el horizonte, la filtración parece haber llegado desde el programa de testeo Xbox Alpha Ring, lo que indica que no deberíamos tardar demasiado en empezar a verlo asomar por el programa Xbox Insider y, tras las pruebas ahí, que empiece a llegar al resto de usuarios.