Desde que se anunció la adquisición de Activision Blizzard por parte de Microsoft, los rumores sobre el destino de Call of Duty se han ido diversificando de formas que antes eran impensadas. La comunidad de Xbox comenzó a formular posibles desenlaces para lo que serían las nuevas entregas de esta franquicia, así como su posible exclusividad con las consolas de Xbox y su posible llegada a Game Pass. En definitiva, un mar de posibilidades que hoy en día sigue siendo un misterio.
Durante el año pasado, que fue el momento álgido de la conversación gracias a los juicios y negociaciones de Microsoft con diversos reguladores y empresas del mundo, descubrimos como espectadores varias cosas que nos daban claridad sobre el futuro de Call of Duty. Dentro de todo ese mundo de información, supimos finalmente cómo funcionaban los contratos de exclusividad con PlayStation, las cláusulas prohibitivas que llegaron a firmar y, como no, los juegos antiguos y su posibilidad de llegar a Game Pass en un futuro, tal vez no tan lejano.
Call of Duty en Game Pass, un golpe de efecto a la industria en 2024
Como sabemos, los juegos más recientes de Call of Duty no llegarán a Xbox Game Pass debido a una cláusula que lo impide. Esto se reveló en los documentos presentados durante el juicio con la reguladora europea FTC. Informes que, además de indicar cómo funcionan los negocios de las compañías para publicar sus juegos, dejaron clara la postura de Microsoft sobre el uso de estos contenidos. Y es que no es para menos, pues una compra de tantos millones debe tener un ingreso u oportunidad para el que compra, por lo que en algún momento serán parte de una estrategia de Xbox.
Según un comunicado lanzado Activision Blizzard antes de la aprobación definitiva de la compra, juegos como Diablo IV y Call of Duty Modern Warfare 3 no están pensados para llegar a Game Pass, pero eso no excluye otras entregas del estudio. Pero hay juegos que sí lo harán en 2024.
Es increíble ver cómo aumenta la expectación por Call of Duty: Modern Warfare III. A medida que continuamos trabajando para lograr la aprobación regulatoria del acuerdo con Microsoft, recibimos algunas preguntas sobre si nuestros próximos juegos y los lanzados recientemente estarán disponibles a través de Game Pass. Si bien no tenemos planes de incluir Modern Warfare III o Diablo IV en Game Pass este año, una vez que se cierre el trato, esperamos comenzar a trabajar con Xbox para llevar nuestros títulos a más jugadores en todo el mundo. Y anticipamos que comenzaríamos a agregar juegos a Game Pass en algún momento del próximo año (2024).
El plan de Xbox para marcar la diferencia
Por lo que esperamos todos los jugadores, se entiende que los Call of Duty antiguos llegarán en algún momento al servicio como un golpe de efecto en un año del que se esperan grandes cosas para la marca Xbox. Pero a pesar de que la adquisición ya se ha oficializado, no hemos visto un gran cambio respecto a lo que hemos recibido como consumidores.
Parte del golpe de efecto es lograr que Call of Duty reciba un trato especial en el servicio de Xbox, cosa que no hay en los competidores. La franquicia de shooters más grande de la industria tiene un dueño, y eso puede marcar el rumbo de las ventas y de la decisión de compra de muchos usuarios. Parece ser que, con el timing justo, quieren realizar un lanzamiento sorprendente en el momento justo, y el mes perfecto es febrero.
El año pasado, la cantidad de juegos que se lanzaban cada mes era impresionante. Un año de no parar, donde cada mes teníamos algo para no perderse. Pero este año es diferente, el ritmo es un poco más bajo y los espacios entre grandes lanzamientos es más pronunciado, por lo que los “meses muertos” se van a sentir. De esta manera, y viendo el panorama del mes de febrero, es el momento ideal para que los antiguos Call of Duty lleguen a Xbox Game Pass.
¿Hasta cuando tendremos que esperar?
Ahora que no hay mucha anticipación por grandes lanzamientos multiplataforma, y entendiendo que a Game Pass puede comenzarle una sequía importante, es momento de que Call of Duty llegue al servicio. Puede parecer algo aleatorio, además de algo “poco estratégico”, pero también se está convirtiendo en una espera preocupante.
Si bien cada empresa decide sus tiempos, cuando un videojuego anuncia su salida y luego se retrasa, afecta su reputación. Ahora, la adquisición de Activision Blizzard es algo que llevamos esperando mucho tiempo, y el hecho de que nada se materialice comienza afectar el boom mediático de lo que fue una compra gigante.
Entonces, y tras todo lo comentado, parece evidente que esto está por definirse. Tras los primeros resultados financieros de Activision como parte de Microsoft, parece que el ambiente es positivo y el balance puede indicar a que ahora quieren arriesgar e intentar cosas nuevas. De esta manera, sí, febrero puede ser el mes para recibir todos los Call of Duty antiguos en Game Pass.
