En un movimiento que sacude al sector sanitario, trabajadores de todo el país se han unido para exigir cambios urgentes. Tras la federalización de los servicios de salud, estos profesionales denuncian una crisis de insumos, equipos deteriorados y precariedad laboral.
La transformación del Seguro Popular al IMSS-Bienestar ha generado un panorama incierto para quienes brindan atención médica a millones de mexicanos. En 23 estados gobernados por Morena o el PVEM, el personal hospitalario se ha visto afectado por la falta de recursos y la inestabilidad contractual.
“Nos falta de todo, desde material de curación hasta medicamentos esenciales”, explica una enfermera del IMSS-Bienestar. “Muchos de nosotros ni siquiera hemos sido basificados, lo que pone en riesgo nuestra situación”.
Ante esta crisis, los trabajadores de la salud han convocado a una manifestación el próximo 15 de octubre en la Ciudad de México. Su objetivo: entablar un diálogo con las autoridades y exigir soluciones concretas.
Entre sus principales demandas se encuentran el mantenimiento de instalaciones, la homologación salarial, la profesionalización del personal y la firma de convenios internacionales que protejan sus derechos laborales.
“Queremos que se escuche nuestra voz y que se tomen medidas para mejorar nuestras condiciones”, afirma un médico del IMSS-Bienestar. “De lo contrario, la calidad de la atención a la población se verá gravemente afectada”.
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