El consumo de ajo diario ayuda en la etapa gestacional y de lactancia de la mujer.
Reducir el colesterol, prevenir el cáncer y otros beneficios del ajo para las mujeres
De acuerdo con el portal Salud 180 el ajo tiene grandes beneficios en la salud de la mujer, por lo que su consumo puede prevenir enfermedades, siendo parte de ciertos tratamientos.
Uno de los grandes beneficios de este alimento es que ayuda a la reducción de la presión arterial que, de acuerdo como lo explica Memorial Sloan Kettering Cancer Center, lo que hace es dilatar los vasos sanguíneos y de esta manera ayuda a mejorar la circulación en el cuerpo.
El portal señala que el consumo de ajo ayuda a eliminar las infecciones vaginales como la candidosis, por sus propredades antibióticas.
La Biblioteca de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, describe la candidosis, como una infección vaginal que se produce por el hongo Candida albicans. Tal y como lo señala el portal de medicina, en muchas ocasiones no produce afecciones en el organismo y tampoco hay presencia de síntomas por lo que estos microorganismos “viven en la vagina y se mantienen mutuamente en equilibrio.”
Así mismo, el Instituto Nacional de Cáncer explica que el consumo regular de este alimento evita el desarrollo del cáncer de estómago, páncreas, esófago y mamas.
También lo define como un cicatrizante natural por lo que recomienda su consumo durante la gestación, pues en el momento de parto puede aliviar las heridas ocasionadas. Así mismo, calma los dolores causados por la lactancia.
Como se indicó anteriormente, el consumo de ajo ayuda a cicatrizar heridas provocadas durante el parto; al tiempo que ayuda a generar la producción de insulina, indica Salud 180, por lo que regula los niveles de azúcar en la sangre en esta etapa gestacional.
De la misma manera, señala que el ajo ayuda a desinflamar, y a reducir sangrados abundantes por tener un efecto antibiótico y antiinflamatorio.
Por otro lado, Salud 180 explica que el ajo mejora la circulación en el cuerpo previniendo la formación de coágulos y trombos.
Por su parte, MejorconSalud explica que el ajo es usado para aliviar todo tipo de dolores y enfermedades crónicas. La alicina, un azufre que se desprende luego de que el ajo es machacado tiene propiedades curativas y medicinales que ayudan al organismo de las mujeres, asegura.
Entre tanto, señala que el ajo está compuesto de una gran cantidad de nutrientes y tiene pocas calorías siendo usado no solo en la preparación de comidas sino en recetas medicinales para contrarrestar afectaciones en el organismo.
De igual manera, el ajo elimina bacterias y toxinas beneficiando al hígado, estimulando a su vez sus funciones hepáticas. MejorconSalud menciona también que este alimento combate los radicales libres que causan el envejecimiento; añadiendo que su consumo diario puede prevenir el deterioro neuronal y enfermedades como el Parkinson y el Alzheimer.
Cabe señalar que el Parkinson es una enfermedad degenerativa que afecta el sistema nervioso. MedlinePlus indica que “ocurre cuando las células nerviosas (neuronas) no producen suficiente cantidad de una sustancia química importante en el cerebro conocida como dopamina”, explicando que esta enfermedad, que afecta a gran parte de la población, tiene factores genéticos.
Entre los síntomas más frecuentes se encuentran el temblor en los brazos, las piernas, las manos, y la cara. Así mismo, los pacientes con esta enfermedad pueden percibir rigidez en su cuerpo y tener complicaciones en su equilibrio y coordinación.
Por último, el portal de salud Cuerpomente concluye que el consumo de ajo ayuda a prevenir el desarrollo de cáncer de estómago. Sin embargo, aclara que no ayuda en la prevención de la aparición de cáncer de colon, por lo que se deduce que las propiedades de este alimento llegan al estómago, pero se pierden tras su llegada al intestino.
Adicionalmente, el portal Salud 180 mencionó que en un estudio publicado en el American Journal of Clinical Nutrition se encontró que los aceites de ajo tienen la capacidad de reducir los niveles de colesterol, por lo que baja considerablemente la posibilidad de tener enfermedades cardiacas.
