AP
Quinientas dosis de la vacuna contra la COVID-19 fueron desechadas luego de que no fueron refrigeradas adecuadamente, por lo que la policía y autoridades federales abrieron una investigación luego de que un empleado del sistema de salud de Wisconsin admitió haberlas arruinado deliberadamente.
El Centro Médico Aurora reportó el sábado que las dosis se estropearon y que un empleado las dejó sin refrigeración durante la noche.
La policía de Grafton, donde se encuentra el centro de salud, dijo en un comunicado que la policía, el FBI y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) están investigando “activamente” el caso. La policía dijo que fueron notificados sobre la supuesta manipulación el miércoles por la noche. La policía informó el jueves por la mañana que no se daría a conocer más información de manera inmediata, y rechazó decir si se había detenido a alguien.
En un comunicado emitido el miércoles por la noche, Aurora dijo que el empleado involucrado reconoció haber “quitado intencionalmente la vacuna de la refrigeración”.
Aurora dijo que ha despedido al empleado y referido la cuestión a las autoridades. El comunicado no mencionaba nada sobre un posible motivo de la acción.
“Seguiremos creyendo que la vacuna es nuestra forma de salir de la pandemia. Estamos más que decepcionados de que las acciones de este individuo resultarán en la demora de más de 500 personas para que reciban la vacuna”, se lee en el comunicado.
