En un momento crítico de las relaciones entre Estados Unidos e Israel, el presidente Biden y el primer ministro Netanyahu se reunieron en una llamada telefónica que sacudió los titulares.
La conversación, descrita como “directa y productiva” por la Casa Blanca, abordó una serie de asuntos candentes entre ambos líderes. Aunque los detalles no se han revelado por completo, la participación de la vicepresidenta Kamala Harris sugiere que se trataron temas de alta prioridad.
Desde el último encuentro entre Biden y Netanyahu en agosto, la tensión ha escalado en la región. Israel ha intensificado sus ataques contra el grupo chií Hezbolá, incluyendo bombardeos en Beirut y una ofensiva terrestre en el sur del Líbano. Estos ataques han cobrado la vida del líder de Hezbolá, Hasán Nasralá, y de su presunto sucesor, Hashem Safi al Din.
La llamada de este miércoles marca un momento crucial en las relaciones entre Washington y Tel Aviv, en un momento en que la seguridad regional se encuentra en un punto crítico. Con Biden y Netanyahu al timón, ¿podrán encontrar un camino hacia la estabilidad?
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