El Gobierno de Estados Unidos (EU) suspendió temporalmente una exigencia medioambiental para facilitar el suministro de combustibles en la costa Este tras el ciberataque contra Colonial, la mayor red de oleoductos de ese país.
La orden, emitida por la Agencia de Protección Medioambiental (EPA, por sus siglas en inglés), afecta a las exigencias de control de evaporación de gasolina en el oleoducto en los estados de Virginia, Maryland, Pensilvania y en el Distrito de Columbia. La suspensión se prolongará hasta el próximo 18 de mayo.
El director de la EPA, Michael Regan, justificó la decisión por “las extremas e inusuales circunstancias y para asegurar que existe un adecuado suministro de gasolina disponible en las áreas afectadas hasta que la oferta en la región se normalice”.
Las autoridades de EU acusaron al grupo de piratas informáticos “Darkside” de ser responsable del ciberataque contra las redes del oleoducto Colonial, que transporta al día hasta 2.5 millones de barriles de gasolina, diésel y combustible de aviación desde las refinerías del Golfo de México al Sur y Este de EU.
El Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) señaló que continúa trabajando con la empresa y sus socios del Gobierno en la investigación del ataque de un “ransomware”, por medio del cual el grupo de piratas informáticos bloqueó el acceso a los ordenadores de la compañía y pide dinero para liberarlos.
El domingo pasado, el presidente estadounidense, Joe Biden, ya había ordenado levantar las restricciones al transporte de combustible por carretera con el objetivo de evitar cualquier desabastecimiento ante el cierre de Colonial.