En una acción contundente, Rusia ha reconocido haber lanzado ataques con armas de alta precisión contra instalaciones del complejo militar-industrial ucraniano, incluida la empresa de diseño Luch en Kiev. Este movimiento se produce en respuesta al bombardeo de la infraestructura civil en la región rusa de Bélgorod con misiles ATACMS de fabricación estadounidense.
Según el Ministerio de Defensa ruso, “todos los objetivos fueron alcanzados” en esta operación de represalia. La capital ucraniana sufrió bajas, con cuatro personas fallecidas en el ataque con misiles balísticos. Además, la ciudad de Zaporiyia también fue blanco de misiles rusos.
“Esta mañana, en respuesta al bombardeo de la infraestructura civil en la región de Bélgorod, las Fuerzas Armadas de Rusia lanzaron un ataque con armas de alta precisión”, indica el comunicado castrense. Moscú había advertido previamente que no dejaría sin respuesta el último ataque ucraniano con misiles ATACMS.
La escalada de tensión entre Rusia y Ucrania continúa, con ambos bandos intercambiando golpes contundentes. Mientras Ucrania busca debilitar la infraestructura rusa, Moscú responde con ataques precisos contra objetivos militares clave. ¿Hasta dónde llegará esta espiral de violencia?
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