El juego del gato y el ratón nuclear
Mientras el mundo observaba la escalada de tensiones entre Israel e Irán, el Mossad ejecutaba una operación de inteligencia que parecería sacada de un thriller de espionaje. Antes de los ataques aéreos masivos, agentes israelíes ya habían infiltrado territorio enemigo, colocando las piezas para un jaque mate estratégico.
Armas bajo la mesa
Fuentes de seguridad revelan que Israel introdujo de contrabando armas de precisión y estableció bases secretas para drones explosivos dentro de Irán. Estas armas se activaron sincronizadamente con los ataques aéreos, desmantelando sistemas de defensa clave cerca de Teherán.
- 100+ ataques coordinados con 200 aeronaves
- Todos los aviones israelíes regresaron intactos
- Videos de operaciones publicados como demostración de fuerza
La sombra del Mossad se alarga
La operación expone la profunda penetración israelí en los secretos mejor guardados de Irán. Comandos operaron en plena capital iraní, atacando misiles balísticos y sistemas de defensa aérea justo cuando comenzaban los bombardeos.
“El Mossad ha tratado a Irán como su patio de recreo durante años”, señaló Holly Dagres, experta del Washington Institute. Desde asesinatos selectivos de científicos nucleares hasta el robo del archivo nuclear en 2018, Israel ha demostrado una ventaja constante en esta guerra secreta.
Muertes que resuenan
Entre las bajas clave se encuentra Fereydoon Abbasi, uno de los pocos científicos nucleares que había sobrevivido a intentos previos. Su muerte marca un punto álgido en la campaña israelí para frenar el programa nuclear iraní.
La operación recuerda el asesinato en 2020 de Mohsen Fakhrizadeh, cerebro del programa nuclear iraní, eliminado con una ametralladora teledirigida mientras viajaba en un convoy blindado.
¿Por qué Irán no puede detenerlos?
Expertos sugieren que la impopularidad del régimen facilita la infiltración israelí. “Es un régimen muy detestado, lo que permite la penetración de inteligencia”, explicó Ram Ben Barak, exsubdirector del Mossad.
La última víctima fue Ismail Haniyeh, líder político de Hamas, eliminado en Teherán con una bomba colocada dos meses antes en su alojamiento. Una demostración más de la paciencia y precisión que caracterizan estas operaciones.
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