En un choque épico entre el magnate tecnológico y el gigante sudamericano, Starlink, la empresa de Elon Musk, se niega a acatar la orden judicial de suspender el servicio de la red social X en Brasil. Esta batalla por la libertad de expresión se libra en un campo de batalla digital, donde los satélites de Starlink se convierten en la última línea de defensa.
Meses atrás, el juez Alexandre De Moraes ordenó a X la eliminación de perfiles vinculados a la extrema derecha liderada por el expresidente Jair Bolsonaro. Musk se negó, acusando al magistrado de actuar sin motivo aparente y de forma sigilosa. Ahora, con las cuentas de Starlink bloqueadas para garantizar el pago de multas impuestas a X, la empresa se planta y se niega a cumplir la orden, desafiando al sistema judicial brasileño.
“No cederemos ante los intentos de silenciar la libertad de expresión”, declaró un portavoz de Starlink. “Seguiremos brindando nuestros servicios a los brasileños, sin importar las presiones que enfrentemos”.
La batalla se libra en múltiples frentes, con Anatel, la agencia reguladora, notificando a los operadores sobre el bloqueo de X, mientras Starlink se mantiene firme en su posición. ¿Quién saldrá victorioso en esta confrontación entre un magnate y un país? Sigue de cerca esta historia en desarrollo en N24, tu fuente de noticias de vanguardia.
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