¡Impresionante hallazgo arqueológico de 3,500 años de antigüedad destruido por un pequeño visitante! En un museo de Haifa, Israel, un niño de 4 años, impulsado por su natural curiosidad, terminó accidentalmente destrozando una valiosa pieza de la Edad de Bronce. Sin embargo, la respuesta del director del museo ha sorprendido a todos.
“Al principio, me encontraba en total negación,” relató Alex, el padre del niño, en una entrevista. “Me resultaba difícil aceptar que había sido mi hijo”, añadió. Y es que la pieza, que se creía había sido utilizada para almacenar suministros locales como vino y aceite de oliva, era una verdadera joya arqueológica.
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Según Inbal Rivlin, director del Museo Hecht, la mayoría de las vasijas similares encontradas en excavaciones estaban rotas o incompletas. Sin embargo, esta pieza expuesta se consideraba un “hallazgo impresionante” por su estado de conservación.
“Hay casos en los que los objetos expuestos son dañados deliberadamente, y estos casos se tratan con gran severidad, incluyendo la participación de la policía,” explicó Rivlin. “En este caso, sin embargo, no fue así. La jarra fue dañada accidentalmente por un niño pequeño que visitaba el museo y la respuesta será la adecuada.”
Lejos de tomar medidas drásticas, el museo ha invitado al niño y su familia a visitar de nuevo el museo para ver la pieza restaurada. “Se organizará una visita guiada para ellos, para que asimilen la experiencia compartida de una forma hermosa,” añadió el director.
Esta sorprendente reacción del museo demuestra su compromiso con hacer que los hallazgos arqueológicos sean accesibles al público, sin barreras ni paredes de cristal. ¡Una lección de empatía y educación que todos deberíamos aprender!
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