Perú se prepara para dar el último adiós a Alberto Fujimori, el expresidente que gobernó con mano de hierro entre 1990 y 2000. La ceremonia, que se espera sea masiva, tendrá lugar este sábado a las 10 a.m. en los exteriores del Ministerio de Cultura, donde miles de personas han desfilado desde el jueves para despedir los restos del controvertido mandatario.
Fujimori, de origen japonés, falleció el miércoles a los 86 años en su vivienda de la capital, luego de cuatro meses de tratamiento contra un cáncer de boca. Su gobierno, marcado por un estilo autoritario y populista, enfrentó una crisis hiperinflacionaria y la violencia indiscriminada de Sendero Luminoso, la guerrilla maoísta que finalmente doblegó a sangre y fuego.
A pesar de que algunos lo recuerdan como el presidente que trajo paz, estabilidad económica y democracia al país, Fujimori también es recordado por disolver el Congreso en 1992 para impulsar una Constitución a su medida y lograr la reelección. Además, fue condenado por delitos de lesa humanidad, incluyendo las matanzas de Barrios Altos y Cantuta, donde 25 personas fueron ejecutadas por un escuadrón militar.
“El señor nunca nos pidió ni disculpa ni perdón, ni pagó una reparación. Para mí es un dictador condenado por varios delitos”, afirmó Gladys Rubina, hermana de una de las víctimas de la masacre de Barrios Altos.
Mientras Perú se despide de Fujimori, su legado sigue dividiendo al país entre fujimoristas y antifujimoristas. ¿Será este el final de una era marcada por luces y sombras? Descúbrelo en N24, tu fuente de noticias de vanguardia.
