CDMX.- En los próximos 364 días, la atención del presidente Andrés Manuel López Obrador no se concentrará en su gobierno, sino en la campaña con vista a la elección del 2 de junio de 2024, asegura Carlos Loret de Mola.
El periodista, uno de los más críticos del gobierno del tabasqueño, asegura en su artículo de hoy que es falsa la promesa hecha por el mandatario sobre que dejará de lado la elección para dedicarse al cierre de su administración.
TE PUEDE INTERESAR: El último año de AMLO. Proyecciones para los próximos 364 días de campaña
En vísperas de la conclusión del proceso interno en Morena, por el que fue seleccionada Claudia Sheinbaum para encabezar los comités de defensa de la cuarta transformación (o candidata presidencial), López Obrador aseguró que iba a entregar el mando del partido al ganador o ganadora y él se dedicaría por completo a consolidar las obras de su administración.
“El Presidente dejará el Gobierno y se dedicará a la campaña. Si no ha podido zafarse del modo-campaña en todo el sexenio, menos ahorita que se requieren sus mejores oficios”, opina Loret de Mola respecto a la promesa hecha por el mandatario.
El periodista asevera que en este último tramo de gobierno “veremos la versión más hipócrita y cínica del Presidente”, es decir, el “AMLO amoroso” que usa para conseguir votos.
“En los últimos 364 días resucitará el ‘AMLO amoroso’. El que resurge siempre que necesita mostrarse moderado para ganar votos. El del 2006 que dialogaba con todos, el del 2012 que tendía la mano, el del 2018 que decía haber aprendido y que todos cabían. La misma farsa que dura hasta el día siguiente a las elecciones”, escribe Loret de Mola su artículo.
TE PUEDE INTERESAR: Un año más de mañaneras y ‘verdades alternas’, la receta de AMLO para mantener su popularidad
En su análisis, el periodista añade que el tabasqueño “implementará el modelo de operación electoral que nos enseñó”, lleno de irregularidades en el interior y hasta con los cárteles operando a favor de Morena, pero asegurará que “es el más limpio y democrático de la historia”.
“Hacia afuera dirá que es el proceso más limpio y democrático de la historia, que él no incide. Pero en el fondo todos sabemos cómo se mueve. Las secretarías de Estados al servicio de la campaña, el presupuesto también, los gobernadores con cuotas de votos, él amagando a los medios de comunicación que no se doblen, apretando las tuercas del empresariado para que financien las campañas de los suyos.
“En el SAT y la UIF atentos para intimidar a quien sea necesario, los operadores amenazando a la gente con que si no sigue Morena, se acabarán los programas sociales. Y mientras, mantener al INE arrinconado y achicado, y dar manga ancha a los cárteles para que operen electoralmente a favor de Morena, como ha sucedido en el pasado”, expone Loret de Mola.
