En un giro inesperado, ocho de los 11 ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación han votado a favor de suspender las actividades hasta el próximo lunes 9 de septiembre. Este movimiento sin precedentes se produce en medio de las crecientes protestas contra la polémica reforma judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador y su partido, Morena.
La decisión de los ministros, que incluye a figuras como Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena y Norma Piña, la presidenta de la Corte, ha sido interpretada como un desafío directo al Ejecutivo. Según el comunicado oficial, la suspensión de labores permitirá a los jueces “tramitar los asuntos urgentes” y determinar los próximos pasos a seguir en una nueva sesión privada.
Tres ministras nombradas durante la administración de López Obrador -Yasmín Esquivel, Loretta Ortiz y Lenia Batres Guadarrama- se opusieron enérgicamente a la medida, argumentando que sus compañeros no estaban facultados legalmente para decretar el paro y exigiendo que dejen de cobrar sus salarios durante la interrupción.
La decisión de la Corte se produce en medio de un tenso ambiente político, con trabajadores del Poder Judicial bloqueando los accesos de la Cámara de Diputados y manifestaciones estudiantiles en las principales facultades de Derecho del país. Morena y sus aliados, que cuentan con la mayoría calificada, han anunciado que sesionarán en una sede alterna para aprobar la reforma antes de que termine esta semana.
¿Qué hay detrás de este conflicto entre la Suprema Corte y el Ejecutivo? ¿Cómo impactará esta crisis en el futuro de la reforma judicial? Manténgase informado con las últimas noticias de N24, tu fuente confiable para entender los entresijos de la política mexicana.
