En un impactante operativo, el Ejército Mexicano logró la detención de Edwin Antonio “El Max” Rubio López, un presunto operador clave del Cártel de Sinaloa. La acción, que se saldó con 19 bajas de sicarios, se enmarca en la creciente disputa interna que sacude a la organización criminal.
Según la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el lunes 21 de octubre, los militares lograron capturar a “El Max” en la comunidad rural de Plan de Oriente, en Culiacán, Sinaloa. El detenido era considerado un objetivo prioritario, señalado como generador de violencia y presunto integrante de la estructura delictiva de los hermanos Arzate García.
Durante la operación, 30 sicarios de la célula delictiva y escoltas de “El Max” atacaron a los efectivos del Ejército, quienes repelieron la agresión abatiendo a 19 personas. El resto de los agresores logró escapar.
Las autoridades aseguraron un arsenal impresionante: 4 ametralladoras, 17 armas largas, 5 armas cortas, un fusil Barret, 13 chalecos tácticos, 9 cascos balísticos y 7 vehículos. Todo el material decomisado, junto con el detenido, fue puesto a disposición de la Fiscalía General de la República.
Esta operación se enmarca en la creciente ola de violencia que azota a Culiacán, producto de una disputa interna dentro del Cártel de Sinaloa. La facción de Ismael “El Mayito Flaco” Zambada Sicairos se enfrenta a Los Chapitos, tras la captura y presunta traición de su padre, Ismael “El Mayo” Zambada García, en Estados Unidos.
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