En los primeros días del nuevo gobierno de Javier May Rodríguez, Villahermosa y sus alrededores se han visto sacudidos por una ola de violencia sin precedentes. Agresiones armadas, incendios de vehículos y ataques a negocios han sembrado el caos en la ciudad.
La jornada violenta coincide con la presentación oficial del nuevo fiscal del estado, José Barajas Mejía, elegido recientemente por el Congreso de Tabasco. Según las autoridades, estos hechos “responden a recientes actos de autoridad realizados”.
Los incidentes reportados incluyen el incendio de dos abarroteras en la colonia Gaviotas, así como tiendas de conveniencia en las colonias Carrizal y Samarkanda. Sujetos armados a bordo de motocicletas y coches rociaron gasolina y prendieron fuego, para luego darse a la fuga.
Además, en el estacionamiento de un almacén de plásticos en la zona centro, fueron quemados tres vehículos, y otros tres más en el puente de La Sierra en Jalapa, uno de ellos un camión repartidor.
La violencia también se extendió a otras zonas, como el fraccionamiento Pomoca y el periférico Carlos Pellicer Cámara, donde se reportaron más vehículos en llamas.
En medio de este caos, la Policía Estatal tuvo que intervenir, retirando “poncha llantas” colocados en la zona conurbada de Bosques de Saloya y en dirección a Villa Parrilla. En este último punto, el intercambio de balas entre presuntos delincuentes y elementos estatales generó aún más desorden.
Ante esta situación, las autoridades han desplegado un operativo coordinado entre fuerzas estatales y federales, incluyendo el uso de un helicóptero, con el objetivo de restablecer el orden y la seguridad en la región.
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