La tormenta política que desató un artista latino
La designación de Bad Bunny como cabeza de cartel del Super Bowl LX ha encendido los ánimos en sectores conservadores estadounidenses, desatando una ola de críticas que promete convertir el evento deportivo en un campo de batalla cultural.
El frente conservador se organiza
Turning Point USA, la influyente organización fundada por Charlie Kirk, anunció un boicot abierto al espectáculo del artista puertorriqueño. La agrupación prepara su propia presentación alternativa, que según prometen, representará los valores “típicamente estadounidenses”.
La postura de Turning Point USA encontró eco en figuras de alto perfil como el expresidente Donald Trump y el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson. Ambos calificaron la decisión de la NFL, Apple Music y Roc Nation como un error estratégico, argumentando que Bad Bunny no refleja los valores del público estadounidense.
Una organización con agenda definida
Fundada en 2012, Turning Point USA ha dedicado la última década a difundir ideas conservadoras entre jóvenes y estudiantes universitarios. Su misión declarada es fortalecer valores tradicionales como el patriotismo y el individualismo, posicionándose como voz influyente dentro del movimiento político conservador.
La organización mantiene una relación cercana con Donald Trump y ha sido señalada por promover divisiones ideológicas y respaldar discursos asociados con el movimiento MAGA. Recientemente, la agrupación enfrentó un cambio de liderazgo tras el asesinato de su fundador, con Erika Kirk asumiendo la presidencia y reafirmando la continuidad de su línea ideológica.
El contraespectáculo toma forma
Mientras la polémica crece, Turning Point USA avanza con planes concretos para su evento paralelo durante el Super Bowl LX. A través de sus redes sociales, la organización invitó al público a participar en una encuesta para definir el estilo musical del espectáculo alternativo, con opciones que incluyen música tradicional estadounidense, hip-hop o alabanzas religiosas.
Mike Johnson, uno de los críticos más vocales, propuso específicamente al cantante de country Lee Greenwood como reemplazo ideal de Bad Bunny para el evento del 8 de febrero de 2026. El congresista considera que la música de Greenwood refleja mejor los ideales patrióticos que, en su opinión, deberían acompañar un evento de la magnitud del Super Bowl.
Seguridad y controversia
Con meses por delante para la presentación, la controversia sigue escalando. Kristi Noem, secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, confirmó que agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduñas (ICE) vigilarán el evento para garantizar el cumplimiento de la ley, añadiendo otra capa de complejidad a un espectáculo que promete ser mucho más que entretenimiento.
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