En una mañana cargada de emoción, familiares, colegas y amigos se reunieron para dar el último adiós a la talentosa artista Selva Alemán. La casa velatoria en Villa Crespo se convirtió en el escenario de un profundo dolor compartido, mientras los asistentes se despedían de una figura que dejó una huella imborrable en el mundo del arte.
Los restos de Selva Alemán encontrarán su morada final en el Cementerio de La Chacarita, un lugar que atesora los sueños y legados de tantos artistas que marcaron la historia cultural de nuestro país.
En medio de lágrimas y abrazos, los presentes recordaron con cariño y admiración la trayectoria de Selva, destacando su pasión, su compromiso y su capacidad para conmover a través de su obra. Cada pincelada, cada escultura, cada performance, se convirtió en un reflejo de su alma, una ventana a su visión única del mundo.
La partida de Selva Alemán deja un vacío difícil de llenar, pero su legado permanecerá vivo en los corazones de quienes tuvieron el privilegio de conocerla y apreciar su talento. Hoy, la comunidad artística se une para honrar a una de sus más brillantes estrellas, cuya luz seguirá iluminando los caminos de quienes buscan expresar su creatividad y transformar la realidad a través del arte.
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