En una reciente decisión judicial, la jueza de distrito de los Estados Unidos Beryl Howell confirmó la postura de la Oficina de Derechos de Autor de los Estados Unidos de que las obras de arte creadas únicamente mediante inteligencia artificial (IA) no pueden acogerse a la protección de derechos de autor.
Este veredicto se produce en medio de una creciente preocupación por la posibilidad de que la IA generativa sustituya tanto a artistas y escritores humanos.
Cuando han pasado más de 100 días desde el inicio de la huelga de guionistas de Hollywood, ha aumentado la preocupación por la posibilidad de que la inteligencia artificial se apodere de la escritura de guiones. Sin embargo, las normas de propiedad intelectual siempre han defendido que los derechos de autor se conceden exclusivamente a las creaciones de origen humano.
Captura de pantalla de la sentencia de Howell. Fuente: CourtListener
La sentencia de Howell fue una respuesta a la disputa legal de Stephen Thaler contra la negativa del gobierno a registrar las creaciones producidas por IA. Thaler, CEO de Imagination Engines -una empresa de redes neuronales- sostenía que la IA que cumpliera los criterios de autoría debía ser reconocida como tal. En consecuencia, la propiedad de la obra debería pertenecer al propietario del sistema de IA.
Howell no estuvo de acuerdo y subrayó la importancia de los seres humanos como autores en la legislación sobre derechos de autor. Señaló casos anteriores como el de Burrow-Giles Lithographic Company contra Sarony, que apoyaba la protección de las ideas hechas por humanos.Otro caso demostró que incluso una foto tomada por un animal no podía protegerse con derechos de autor.
Howell habló de cómo los derechos de autor motivan a los seres humanos en sus esfuerzos creativos. Señaló que los derechos de autor y las patentes se concibieron como una propiedad protegida que fomentaba la ciencia y las artes al alentar la creación y la innovación.
Este veredicto llega en medio de los debates legales en curso sobre las empresas de IA que utilizan contenidos protegidos por derechos de autor para su entrenamiento. Varios artistas han presentado demandas en California alegando violaciones de los derechos de autor, lo que podría obligar a las empresas de IA a desmontar sus modelos lingüísticos.
Esta sentencia cambia las cosas sobre el debate sobre la IA y los derechos de autor. Aunque las obras de arte creadas por IA no puedan acogerse a los derechos de autor, subraya la importancia de la creatividad humana en la propiedad intelectual.
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