Russell Wilson es el quarterback mejor pagado de la NFL en el momento en que escribo esto. Pero eso va a cambiar muy pronto.
Según un reporte de NFL Network, Patrick Mahomes y los Kansas City Chiefs firmaron un acuerdo por 10 temporadas y 503 millones de dólares, con “mecanismos” que le garantizan 477 mdd. Eso lo convierte en el contrato más grande de la historia, no sólo de la NFL, sino del deporte.
Hasta ayer, el primer lugar le pertenecía a Mike Trout, centerfielder de Los Angeles Angels, quien en marzo de 2019 firmó por 12 años y 426.5 millones de dólares.
¿Merece toda esa plata ‘Showtime’ Mahomes?
Juzgue usted lo que el chico de 24 años ha hecho en dos temporadas en la NFL: campeón del Super Bowl, MVP del Super Bowl, MVP de la NFL, dos veces invitado al Pro Bowl, una vez nombrado primer equipo del All-Pro, 76 pases de touchdown, 24 triunfos, 9,412 yardas, rating de 108.9 y tres regresos de 10 o más puntos en la misma postemporada, entre otros logros.
¡Por supuesto que merece ese dinero!
Además, según Adam Schefter, el valor del contrato no está ligado a un porcentaje del tope salarial. O sea que estamos a punto de ver un unicornio en la NFL.
¿Y DAK?
Hay otro quarterback que sigue en espera de firmar un contrato multianual. Quizá hayas oído de él: Dak Prescott.
Prescott y los Dallas Cowboys no han podido ponerse de acuerdo con la extensión de contrato del joven quarterback, quien, según reportes, rechazó una oferta por 34 millones de dólares por temporada y más de 110 millones garantizados.
Prescott aceptó firmar la oferta exclusiva de jugador franquicia por 31.4 mdd y ahora tiene hasta el 15 de julio para llegar a un acuerdo con Jerry Jones, dueño de los Cowboys.
¿Qué tanto afecta el arreglo de Mahomes a Dak? Mucho.
Mahomes -a reserva de que la información se confirme- ganará 45 millones de dólares por temporada, 10 mdd más que Russell Wilson.
¿Eso obliga a Jones a pagarle 40-45 mdd por año a Prescott? Por supuesto que no.
Y ahora más que nunca creo que los Cowboys deben esperar a ver la campaña 2020 de Prescott y volver a negociar en los primeros meses de 2021.
Si Dak -estadísticas aparte- es capaz de llevar a Dallas, digamos, al Campeonato de la NFC, quizá Jones deba doblar las manos y abrir la chequera.
Pero si Prescott otra vez se queda corto y no gana ante equipos de Playoffs, como en 2019, o ni siquiera es capaz de ganar la débil División Este, es probable que Jerry decida darle las gracias y Dak va a tener que probar suerte en otro lado.
En Seattle, Wilson tuvo su contrato astronómico después de llevar a dos Super Bowls a los Seahawks.
Probablemente estemos ante el nacimiento de una tendencia en la NFL. ¿Por qué pagarle a un quarterback que no ha ganado nada?
Parece que Jerry Jones está de acuerdo.
