Partido loco el que ha enfrentado a Borussia Mönchengladbach y Bayern Múnich. Pese a que los visitantes llegaban como líderes y parecían tener todas las cartas en la mano para alzarse con los tres puntos, la situación ha sido completamente distinta de la que hubiera cabido esperar.
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Tardó muy poco en ponerse por delante el cuadro bávaro. Así, apenas habían transcurrido 21 minutos cuando Robert Lewandowski se encargaba de abrir el marcador desde el punto de penalti después de un penalti tan claro como absurdo por mano en el área. En el 26 Leon Goretzka ampliaba la ventaja con un potente disparo que se convertía en el 0-2.
Sin embargo, y cuando nadie lo hubiera esperado, los locales le dieron la vuelta al envite. Hofmann (minutos 36 y 45) igualaba el choque antes del descanso y Florian Neuhaus consumaba la remontada en el 49. Desde ese instante el Bayern Múnich cercó la portería rival con el claro objetivo de sacar algo positivo de su visita. Sin embargo, las ocasiones no terminaron de ser tan claras como hubiera cabido esperar y la victoria se quedó en casa.