Este martes, el volcán español de Cumbre Vieja, en La Palma, cumplirá treinta días de actividad. Durante este tiempo, la lava emanada ha sepultado más de 760 hectáreas de terreno y destrozado, total o parcialmente, más de dos mil construcciones. Ahora la preocupación se centra ahora en los animales que quedaron atrapados entre lenguas de lava.