En una decisión sin precedentes, el Senado mexicano ha aprobado una convocatoria que abrirá las puertas a la elección de 881 jueces, magistrados y ministros del Poder Judicial de la Federación (PJF). Esta medida, impulsada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, busca democratizar y revitalizar uno de los pilares fundamentales de la nación.
La votación, que se llevó a cabo con 78 votos a favor y 39 en contra, ha generado una ola de debate y expectativa en todo el país. Los legisladores del oficialista Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), junto con el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), respaldaron la iniciativa, mientras que la oposición del Partido Acción Nacional (PAN), el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Movimiento Ciudadano (MC) se opusieron.
“Es una convocatoria histórica. Ningún país del mundo elige a todas sus personas juzgadoras y desde México se abre un nuevo camino para la humanidad en la democratización del Poder Judicial de las naciones”, declaró Gerardo Fernández Noroña, presidente de la mesa directiva.
La aprobación de esta convocatoria marca un hito en la reforma del Poder Judicial, un proceso que ha sido objeto de intensos debates y cuestionamientos. Ahora, se abre un proceso de selección que promete ser transparente y participativo, con la postulación de candidatos a cargos como ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y jueces de Distrito.
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