Luto en Hollywood: Chad McQueen, hijo del legendario actor Steve McQueen, falleció a los 63 años en su hogar de Palm Springs, California. El actor, conocido por su papel como Dutch en la saga de películas Karate Kid, dejó un legado imborrable en la industria del entretenimiento.
La familia de McQueen, incluida su esposa Jeanie y sus hijos Chase, Steven y Madison, expresaron su profundo dolor en un comunicado: “Con gran pesar anunciamos el fallecimiento de nuestro padre, Chad McQueen. Su notable tarea como padre amoroso para nosotros, junto con su compromiso inquebrantable con nuestra madre, verdaderamente ejemplificaron una vida llena de amor y dedicación”.
Más allá de su fama heredada, Chad McQueen se labró un nombre propio en Hollywood gracias a su interpretación del personaje de Dutch en la saga de Karate Kid. Su cabello rubio platinado y su actitud despiadada lo convirtieron en uno de los actores más reconocibles de la franquicia. Incluso, durante la segunda temporada de la serie Cobra Kai, se reveló que Dutch había estado cumpliendo condena en prisión.
Pero McQueen no solo se destacó como actor, sino también como piloto de carreras. Siguiendo los pasos de su padre, compitió profesionalmente en eventos como las 24 Horas de Le Mans y las 12 Horas de Sebring, y fundó su propia compañía, McQueen Racing, dedicada al desarrollo de automóviles y motos de alto rendimiento. Lamentablemente, su pasión por la velocidad le jugó una mala pasada en 2006, cuando sufrió un accidente casi fatal que puso fin a su carrera profesional como piloto.
La partida de Chad McQueen deja un vacío en la industria del entretenimiento, pero su legado como actor y piloto perdurará por siempre. Descansa en paz, leyenda.
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