Ciudad de México.
No crea que es la única, pero es de la que tenemos copia – nos asegura un profesor en Ciudad de México. –
Quizá no son la mayoría, pero por si quedase algún profesor despistado que sigue pensando que los “comisionados” son puro amor al arte, en la siguiente entrega de esta columna le desplegaremos con nombres y apellidos quiénes son los que forman parte de esa “nómina oculta” y cuánto chupan, digo, cuánto ganan, “extraoficialmente” en el sindicato de la sección 50 correspondiente a Nuevo León.
No es de extrañarse, los profesores perdieron ciertos privilegios con la Reforma Educativa, de Enrique Peña Nieto, a los profesores que odiaban el gis y tenían años comisionados los devolvieron al aula, pero como buen defensor de los derechos, el SNTE no se quedó de brazos cruzados, pues ¿quién iba a aceptar trabajar en el SNTE a contra-turno y sin beneficios? Nadie, en absoluto.
La jugada maestra salió, una nómina secreta que ya tiene más de cinco años operando, donde profesores que cobran su cheque cada quince días, además acuden por oootro cheque, pero al SNTE.
¿Quiénes son estas rémoras de la corrupción? Perdón, ¿quiénes son estos profesores que obtienen prebendas (muchas risibles) a cambio de sentir un poquito de valor?
La siguiente semana le daremos santo y seña de quienes son esos maestros en Nuevo León que gustosos y sabrosos llegan cada 30 y le “sangran” al dinero de las cuotas un monto predestinado.
Profesores que incluso andaban “contendiendo” por la Secretaría General y abucheando a Juan José Gutiérrez, aparecen en esa nómina, con “jugosos” números más allá de su pago como docentes.
Uno de ellos, que quizá es el que se está imaginando usted (si es maestro en Nuevo León), mensualmente recibe entre 25 y 30 mil pesos extras, de la nómina oculta del SNTE.
Otros no tan afortunados reciben entre seis mil y 10 mil pesos como apoyo, esto varía según la importancia política del susodicho.
Entonces estimado lector, no crea lo que lee en los facebook’s retorcidos de estos “comisionados”, esas leyendas de “Al servicio del pueblo” y “Todos somos uno” es pura demagogia, en realidad están ahí para servirse ellos mismos y lo han hecho por años, con la cuchara grande y de las cuotas de los verdaderos trabajadores, los que se la parten en el aula.
Pero no se preocupe, estimado preocupado, que aquí les daremos una exhibida doble, porque también encontramos unos “profes” que reciben apoyo extra, y no obstante, hasta son “proveedores”. Imagine usted.
Aquí nos leemos la próxima entrega, donde le presentaremos la famosa nómina oculta que por cierto los aplaudidores de López Rosas ni se inmutaron en cuestionar en el informe de finanzas, porque claro, ni venía en el informe y ni les interesaba hacerlo público, pues esos aplaudidores también llevan moche, digo, pago.
Y si le preguntan, lo leyó primero aquí, en Sin Chayote.