La tarde de este lunes corrió como pólvora la versión de que Joseph Ratzinger, el papa Benedicto XVI, había fallecido a los 95 años de edad. La fuente de periodistas y medios de comunicación que cayeron en la trampa fue una cuenta falsa de Twitter, con poco más de mil seguidores, que se hizo pasar como Georg Bätzing, el actual presidente de la Conferencia Episcopal Alemana.
Uno a uno, grandes medios y referentes de las redes dieron por cierta la versión, sin tomar en cuenta que ni siquiera se trataba de una cuenta verificada, que es una forma de garantizar la identidad detrás de un arroba.
La fake news o noticia falsa fue retomada por medios nacionales e internacionales. Benedicto XVI se convirtió en el tema más comentado y cientos, tal vez miles, de personas comenzaron a enviar sus condolencias. Valentina Alazraki, corresponsal de Televisa en el Vaticano durante décadas, tuiteó que no había información oficial sobre el tema.
Aristegui Noticias no publicó nada sobre este tema, ante la falta de una fuente de información confiable.
El expresidente Felipe Calderón tuiteó su pésame:
El Campeón de la mentira
Aunque muchos medios decidieron esperar, en realidad la burbuja reventó cuando la propia cuenta que promovió la mentira decidió revelar el chiste:






