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En México las y los trabajadores, bajo una relación laboral formal, tienen derecho a que su patrón haga aportaciones destinadas al ahorro para la compra de una casa con un crédito Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit).
En ese sentido, de las aportaciones patronales al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), una parte se va destinando a la Subcuenta de Vivienda de las y los trabajadores para que así puedan comprar una casa.
El mecanismo con el que opera el Infonavit obtiene sus aportaciones de tres fuentes: gobierno, empleador y trabajador, lo que permite crear un fondo de ahorro para luego tramitar un crédito de vivienda.
Sin embargo, existe una forma en la que un trabajador puede perder el dinero de sus aportaciones.
¿Puedo perder mi dinero de la subcuenta de vivienda?
El motivo por el que se pueden perder las aportaciones hechas es que el trabajador tenga problemas con su Número de Seguridad Social (NSS) con el que está dado de alta ante el IMSS.
Asimismo, el NSS es con el que se identifica al titular de las aportaciones patronales que se destinan a la Subcuenta de Vivienda Infonavit y a la cuenta en la Administradora del Fondos para el Retiro (Afore).
Ahora bien, en caso de que tengas un error de registro en tu NSS, hay la posibilidad de que pierdas tus ahorros. Sin esta clave no se te podrá identificar de manera adecuada y podrás recibir las aportaciones de tu empleador.
Esto afecta también tu situación en el Infonavit, donde no podrás conseguir un crédito hipotecario al no haber manera de identificarte como trabajador con la información laboral que lo corrobore.
Estos problemas ocurren, por ejemplo, cuando cambias de trabajo y no recuerdas tu NSS y al contratarte se tramita uno nuevo, lo que genera una entrada duplicada. Por esta situación puedes perder tus ahorros.
No obstante, las inconsistencias con el NSS pueden ser aclaradas ante el IMSS, para lo que necesitarás presentar un documento en el que esté indicado tu clave del Seguro Social, además de tu identificación oficial vigente, Clave Única de Registro de Población (CURP) y el número del Registro Federal de Contribuyentes (RFC).
Hay que tener presente que a partir de los 16 años de edad se puede registrar a una persona, pero para ello debe encontrarse estudiando o trabajando, y en el segundo caso, será el empleador el que deba tramitar por primera vez el NSS de un trabajador.
Recordemos que el NSS o es una clave para identificarte como derechohabiente, ya sea como trabajador o beneficiario. Dicha numero lo utilizan las y los trabajadores a lo largo de tu vida como afiliados del Seguro Social.
De esta manera, las y los trabajadores registrados en el IMSS y con vigencia de sus derechos al tener una relación laboral están activos para el Seguro Social a través del NSS con lo que pueden recibir servicios de salud y estudios de especialidad.
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