Tras 4 meses de cortejo, PRI cede ante Morena

0

La posición que asuma la bancada del PRI en San Lázaro será la clave para que la Cuarta Transformación (Morena, PT y Verde) avale la reforma en materia eléctrica del presidente Andrés Manuel López Obrador.

El tricolor cuenta con 71 diputados federales y Morena requiere de 56 o 57 votos para llegar a los 333 o 334, necesarios para aprobar las reformas constitucionales (dos terceras partes).

Expertos en economía y en política consideran que si Morena va a obtener votos de la oposición para aprobar este proyecto presidencial, será de legisladores del PRI; sin embargo, advierten que esta reforma, de aprobarse, será una regresión económica, ambiental y será dañina para el país, por lo que no redituaría al tricolor.

Ayer, el Comité Ejecutivo Nacional del PRI, encabezado por Alejandro Moreno, flexibilizó su postura y expuso que reflexionará y analizará los alcances de la propuesta presidencial de manera coordinada con todos los diputados del tricolor.

“Como parte de la revisión y análisis de la iniciativa, el partido y el grupo parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados, con su coordinador, Rubén Moreira Valdez, convocarán a foros de discusión y debate en torno a su contenido, con la participación de expertos y representantes de los diversos sectores económicos y sociales del país”, explicó el partido en un comunicado.

Expresó su apertura a debatir el tema energético, bajo la premisa de que debe promoverse el crecimiento y desarrollo nacional, sin afectar a las familias.

Sin embargo, el PRI, a diferencia de los opositores PAN, PRD y MC, no salió a definir una postura tajante de rechazo el 1 de octubre, cuando se envió la iniciativa a San Lázaro.

Coqueteo

Hace cuatro meses, el 8 de junio pasado, el presidente Andrés Manuel López Obrador lanzó el anzuelo al PRI para que le ayude a aprobar reformas constitucionales en la Cámara, luego de que la Cuarta Transformación perdió la mayoría calificada.

Además, el coordinador de Morena en San Lázaro, Ignacio Mier, adelantó que es viable una alianza con el tricolor para sacar adelante las reformas.

En el recinto, los legisladores de la autollamada Cuarta Transformación han cedido y otorgado al tricolor puestos clave en el Palacio Legislativo.

El pasado 29 de agosto, aceptaron que el coordinador del PRI en San Lázaro, Rubén Moreira, presidiera la Junta de Coordinación Política (Jucopo) en el primer año de la 65 Legislatura.

Luego, el 9 de septiembre, en el debate de dictámenes, el bloque opositor de Va por México se fracturó en la Cámara de Diputados, pues el PRI decidió apoyar la minuta para crear la Ley Orgánica de la Armada de México para que este cuerpo apoye en tareas de seguridad interior.

Al siguiente sábado, López Obrador anunció que el gobernador saliente de Sinaloa, Quirino Ordaz (PRI), sería el embajador de México en España.

Unos días después, Morena cedió al PRI dos comisiones, que son la de Gobernación, la cual será presidida por el líder nacional del tricolor, Alejandro Moreno, y la de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación, la cual encabezará Guillermo Angulo.

Asimismo, el tricolor ha tenido un cambio de discurso, pues el pasado 1 de septiembre, al fijar la posición de su bancada con motivo del Tercer Informe de Gobierno, el diputado federal y presidente del tricolor, Alejandro Moreno Cárdenas, aclaró que el PRI, en la 65 Legislatura, no será subordinado de nadie, mucho menos del Ejecutivo.

El propio coordinador del PRI, Rubén Moreira, declaró a EL UNIVERSAL que el bloque Va por México permanecerá y está sólido.

Prevén acuerdos políticos

La economista Valeria Moy recordó que Morena y sus aliados no tienen los votos necesarios; sin embargo, no le sorprendería que los consigan, pues todo dependerá de qué acuerdos políticos logren hacer con otros partidos. “Es real la posibilidad de que sucedan”, dijo.

Aunque adelantó que no le gustaría que los obtuvieran, pues la reforma afectaría al país y no desea que pase esa reforma, es necesaria una discusión amplia, intensa y técnica.

“Seguramente habrá acuerdos que se podrán alcanzar. Acuerdos que no necesariamente vamos a conocer. Si hay algún voto que pudieran pescar, serían los del PRI.

“Vamos a ver cómo funciona y cómo opera el PRI, pero no me extrañaría. No quiero que eso suceda porque es una reforma muy dañina para la competitividad del país, aunque suene trillado: un país que no tiene energía eléctrica buena (calidad de buen voltaje), bonita (que venga de buenas fuentes) y barata (sobre todo en regiones como la frontera y el sur), simplemente se va a quedar más rezagado frente a otros.

“Se vienen semanas de negociación, negociación o de imposición, imposición e imposición”, aseveró.

Asimismo, el exconsejero presidente del IFE y director de la consultoría Integralia, Luis Carlos Ugalde, recordó que a Morena le faltan 56 votos en la Cámara de Diputados y 10 en el Senado, entonces, afirmó, es muy complicado que la reforma pase, pues es un proyecto radical, negativo, que no tiene pies ni cabeza, es una regresión estructural a la economía, y no es de interés público.

“No veo cuál sería la ganancia para el PRI. Está en una situación crítica, incluso en una fase de declive que puede convertirse en una extinción. Votar a favor del gobierno, ¿para qué? Simplemente agudizaría ese declive y debilidad, no veo qué ganancia podría tener el PRI, por eso es que me parece muy difícil que pueda apoyar esto. No veo la ganancia ni de reputación, ni de poder político, ni de poder electoral”, mencionó.

Lee también: Esta es la iniciativa de AMLO para fortalecer a la CFE, incorpora el litio y cancela permisos