Lavarnos los dientes es cosa de diario, la pasta dental, el cepillo y el enjuague bucal son esenciales para una buena higiene dental, pero ahora éste último también tendría beneficios para la salud en general, al inactivar la carga viral del Covid-19. La Penn State College of Medicine publicó un estudio, en el Journal of Medical Virology, en el que demostró que los enjuagues bucales y nasales pueden matar los coronavirus, al romper las capas grasas de los microbios.
La investigación argumenta que el uso de máscaras y el distanciamiento social pueden disminuir de gran forma la transmisión y propagación del coronavirus, pero la práctica no se han adoptado a nivel mundial, por lo que se buscan nuevas estrategias para disminuir la transmisión.
Afirman que los enjuagues nasales y bucales, que tienen que ver de forma directa con los principales sitios de recepción y transmisión de coronavirus, pueden proporcionar un nivel adicional de protección. Para realizar el estudio los científicos evaluaron productos de venta libre.
Penn State ahora está buscando financiamiento y aprobación para realizar su propio ensayo en personas. Foto: Pixabay
Concluyeron que varios productos de enjuague bucal fueron altamente efectivos para inactivar virus infecciosos con más del 99,9 por ciento, incluso con un tiempo de contacto de 30 segundos. “En el manuscrito actual hemos demostrado que varios productos sanitarios comúnmente disponibles tienen propiedades virucidas significativas con respecto al VHC”, afirman.
Investigación de enjuagues bucales y nasales
Los experimentos fueron en el laboratorio, no en personas. Y los científicos de Penn State utilizaron primos del coronavirus pandémico, porque el virus real de Covid-19 solo se puede estudiar en laboratorios con bioseguridad adicional.
Craig Meyers, profesor de Penn State que dirigió el estudio, aseguró que un grupo alemán recientemente corroboró los resultados con sus propios experimentos de laboratorio, usando el coronavirus pandémico.
En todo el mundo, se realizan investigaciones en humanos para probar esa teoría. Penn State ahora está buscando financiamiento y aprobación para realizar su propio ensayo en personas.