Familia oaxaqueña durante el regreso a clases (Foto: Cuartoscuro)
Este martes, el gobierno de Oaxaca anunció el fallecimiento del presidente municipal de San Bartolomé Quialana, Victorino Gómez Martínez. El reporte no aclaró la causa de muerte, pero estuvo acompañado de una exhortación a la población oaxaqueña para protegerse ante el incremento de contagios regionales por Covid-19.
Gómez Martínez es el séptimo alcalde oaxaqueño en morir a causa del coronavirus. Los demás son Javier Santiago Ruiz de Reyes Etla, Florencio San Germán de San Baltazar Chichicápam, Artemio Ortiz Ricardez de Tamazulápam del Espíritu Santo, Fernando Bautista Dávila de San Juan Bautista Tuxtepec, Alfredo Juárez de Matías Romero Avendaño y Pedro Escárcega de Santiago Jocotepec.
Oaxaca es el estado donde más alcaldes han muerto por la enfermedad. Le siguen Veracruz (tres decesos de presidentes municipales), Tlaxcala y Yucatán (dos cada uno), Puebla, el Estado de México, San Luis Potosí, Nayarit y Sonora (un deceso en cada uno).
El estado tiene un total de 13 mil 083 contagios acumulados y mil 224 decesos. El registro municipal de San Bartolomé Quialana no cuenta con fallecimientos, y sólo registra un contagio. Hay subregistros parecidos en los demás municipios donde han muerto alcaldes. Casi todos están repartidos entre la Sierra sur y la zona de Valles centrales. También hay municipios de la entidad que no tienen registros de contagios o decesos.
De acuerdo con el blog del doctor Arturo Eldery, de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, en la última semana los registros hospitalarios por coronavirus en Oaxaca se desplomaron, al mismo tiempo que la positividad subió hasta un 62 por ciento.
En general, la información sugiere que el estado tiene un caso grave de subregistro. Es decir, es muy probable que la pandemia en Oaxaca sea mucho más grave de lo que sugiere el conteo oficial. (Gráficos: Twitter @ArturoErdely)
La positividad es la cantidad de pruebas positivas en el total de pruebas aplicadas. Es un dato que sirve para saber si la cantidad de pruebas pcr en una región es suficiente. La recomendación de la Organización Mundial de la Salud es que ese índice no sobrepase el 5 por ciento.
En general, la información sugiere que el estado tiene un caso grave de subregistro. Es decir, es muy probable que la pandemia en Oaxaca sea mucho más grave de lo que sugiere el conteo oficial.
Además de la información estadística, esta posibilidad está respaldada por los hechos geográficos de la región. La sierra de Oaxaca está caracterizada por sus poblaciones de escasos recursos y de difícil acceso. El transporte a los centros urbanos del estado es complicado. De acuerdo con el mapa de “Vulnerabilidad a Covid-19″ de la UNAM, ninguno de los municipios en la zona central de Oaxaca tiene más de cinco unidades médicas. La vulnerabilidad en la región está clasificada como crítica.
Los casos de alcaldes llaman la atención porque son figuras públicas, pero sirven para cuestionar al conteo estatal sobre la posibilidad de que sean las únicas personas que han fallecido en sus municipios.
Dentro de la lista de municipios que han perdido a sus dirigentes, el único que presenta una cifra acorde con las condiciones de vulnerabilidad en la entidad es San Juan Bautista Tuxtepec. La segunda ciudad más poblada de Oaxaca tiene mil 238 contagios acumulados y 183 decesos.
El estado está en el color naranja del semáforo epidemiológico.
