Las autoridades mexicanas investigan una ejecución extrajudicial presuntamente ocultada por un montaje policial (Foto: Especial)
Una camioneta blindada, doce cadáveres y armas de alto calibre. Esas fueron las pruebas que el pasado 3 de julio el Ejército de Tamaulipas enseñó como trofeos de guerra, tras reportar un enfrentamiento en Nuevo Laredo con supuestos miembros del Cártel del Noreste.
Doce hombres abatidos era el saldo del cruce en el que ningún elemento resultó herido. Casi dos meses después de los hechos, el diario El Universal presentó una serie de pruebas para demostrar que todo habría sido un montaje de los militares. Un video publicado por dicho medio demostró que las fuerzas de seguridad iniciaron una persecución contra los supuestos delincuentes, y al menos a uno de ellos ordenaron matarlo.
La evidencia ha forzado a las autoridades mexicanas a abrir una investigación para determinar lo sucedido.
Un video publicado por dicho medio demostró que las fuerzas de seguridad iniciaron una persecución contra los supuestos delincuentes, y al menos a uno de ellos ordenaron matarlo (Foto: Captura de pantalla)
Las grabaciones han sido clave. Las imágenes difundidas por El Universal muestran los cuerpos dentro y alrededor de una camioneta. Los occisos están vestidos con uniformes militares y chalecos con la sigla CDN, vestimenta identificada como del Cártel del Noreste, una de las organizaciones criminales que actúan en la región.
Uno de los cuerpos está tumbado en la batea de la unidad, a su alrededor se ve un charco de sangre y cinco soldados apuntándole con armas. “¡Está vivo, mátalo a la verga”, dice uno de ellos.
En la entidad, acostumbrada a ver y leer muertes de sicarios del crimen organizado, la noticia pasó desapercibida. De acuerdo con el informe policial homologado de Tamaulipas al cual tuvo acceso El Universal, antes de los hechos, cuatro vehículos oficiales realizaban reconocimientos motorizados sobre la calle A. Valdez Reyna de la colonia Nueva Era, al salir hacia la carretera Aeropuerto con rumbo al norte, fueron agredidos con armas de fuego por miembros de la delincuencia organizada.
Eran tres camionetas tipo pick up que llevaban personas armadas. El Ejército repelió la agresión y les dio seguimiento. Más adelante, dos de esas tres camionetas darían un giro en U y dispararían a los militares, dejando un vehículo inmovilizado. Los demás vehículos militares siguieron a la tercera unidad.