La guerra arancelaria de Trump sacude los cimientos del T-MEC
La decisión de Donald Trump de imponer un arancel del 25% a las importaciones de acero y aluminio ha desatado una tormenta comercial sin precedentes en Norteamérica. Este golpe al tratado de libre comercio entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC) ha dejado a los principales exportadores de estos metales, Canadá y México, en una situación delicada.
Canadá, el principal proveedor de acero y aluminio a Estados Unidos, se encuentra de vuelta en la cruda realidad de que las reglas de juego con su vecino han cambiado radicalmente. Tras un breve respiro, Ottawa se enfrenta ahora a nuevos aranceles que amenazan con impactar gravemente a su economía, especialmente en sectores clave como la industria automotriz.
Por su parte, México también se ve afectado de manera significativa. Los aranceles no solo aumentarán los costos de producción, ensamblaje y montaje final, sino que podrían generar una recesión en el país si Estados Unidos llega a aplicar un arancel generalizado del 25% a todas las exportaciones mexicanas. Expertos advierten que esto impactaría en el 7% del PIB mexicano.
Brasil, el segundo mayor proveedor de acero a Estados Unidos, también se encuentra en la mira de la ofensiva arancelaria de Trump, lo que representa un duro golpe para la primera potencia económica de América Latina.
En medio de esta tormenta comercial, la continuidad del T-MEC queda en suspenso mientras se multiplican las tensiones diplomáticas. Los líderes políticos de Canadá y México han unido sus voces para denunciar el “matonismo” de Trump, advirtiendo que los aranceles no solo perjudican a sus países, sino también a las industrias y consumidores estadounidenses.
¿Cómo se desarrollará esta nueva crisis comercial en Norteamérica? Sigue de cerca la cobertura de N24 para mantenerte informado sobre los últimos acontecimientos y sus implicaciones.