Walmart, el gigante minorista estadounidense, ha decidido frenar algunas de sus iniciativas clave en materia de diversidad, equidad e inclusión (DEI). Esta decisión, que llega en medio de una creciente presión política, tendrá repercusiones en todo el panorama empresarial del país.
La empresa ha anunciado que pondrá fin a los programas de capacitación sobre equidad racial para su personal y que está evaluando sus esfuerzos por aumentar la diversidad de sus proveedores. Además, Walmart está revisando el financiamiento de eventos del Orgullo y similares, y monitoreando su mercado en línea para eliminar productos sexuales o transgénero dirigidos a menores.
Estos cambios se producen en un momento en el que muchas otras empresas también han dado marcha atrás en sus iniciativas de DEI, en parte debido a la presión legal y política. Expertos como Shaun Harper, de la Universidad del Sur de California, advierten que esto podría llevar a una “eliminación continua” de los roles y la capacitación relacionados con la diversidad en las empresas.
Sin embargo, los empleados podrían exigir que los empleadores mantengan sus compromisos con la diversidad, lo que podría generar conflictos. Las iniciativas de DEI han demostrado tener beneficios tangibles, como la reducción de la rotación de personal y el aumento de la motivación.
A medida que Walmart y otras empresas se alejan de sus programas de DEI, es crucial que mantengan un diálogo abierto con sus empleados y clientes, y que busquen formas de fomentar un sentido de pertenencia y representación en sus organizaciones. Solo así podrán navegar con éxito este delicado equilibrio.
¿Qué depara el futuro para la diversidad en el mundo corporativo estadounidense? Sigue leyendo en N24 para mantenerte informado sobre esta evolución clave.
