En una noche de terror, las calles de la capital mexicana se convirtieron en un caos total durante las infames “Rodadas del Terror” organizadas por grupos de motociclistas. Según informes, la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México (SSC-CDMX) tuvo que intervenir de manera enérgica, arrestando a cerca de 20 personas e incautando más de 400 motocicletas por incumplir el Reglamento de Tránsito.
Los motociclistas, disfrazados y desafiando las normas, se congregaron en puntos clave de la ciudad, como la Avenida Insurgentes Sur, la Calzada de Tlalpan y la Avenida Tláhuac, entre otros. Allí, las autoridades desplegaron un amplio operativo de seguridad y control de tránsito, con la participación de 348 efectivos, 55 unidades oficiales, 11 motocicletas patrulla, 7 grúas y 2 remolques.
Durante los operativos, se revisaron 531 motocicletas, de las cuales 416 fueron llevadas a depósitos vehiculares, y se detuvo a 18 personas que fueron presentadas ante un Juez Cívico para determinar sus sanciones. Lamentablemente, también se reportaron incidentes violentos, como un asalto a un automovilista en Xochimilco por interferir en el recorrido de los motociclistas.
Las autoridades habían advertido previamente que no tolerarían el incumplimiento de las normas de tránsito, como el uso obligatorio de casco, la restricción de llevar menores de 12 años o más de dos pasajeros, y la prohibición de acrobacias o maniobras peligrosas. Sin embargo, la gran mayoría de estas regulaciones fueron ignoradas por los participantes de las “Rodadas del Terror”.
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