En un giro inesperado, el multimillonario Elon Musk se encuentra en el ojo del huracán político. Un juez de Filadelfia ha iniciado una audiencia tras la solicitud de un fiscal para cancelar el sorteo diario de un millón de dólares, que Musk está utilizando para impulsar la campaña presidencial de Donald Trump.
Los abogados de Musk intentaron trasladar el caso a un tribunal federal, argumentando que se trata de un asunto relacionado con las elecciones federales. Sin embargo, el juez estatal Angelo Foglietta decidió proceder con la audiencia en el Ayuntamiento.
Según el fiscal del Distrito de Filadelfia, Larry Krasner, Musk y su grupo de acción política “America PAC” han realizado “descaradamente” estos sorteos diarios, a pesar de los esfuerzos de Krasner por detenerlos. Krasner, de tendencia demócrata, presentó una demanda el lunes para poner fin a estas “loterías ilegales”, que están abiertas a los votantes registrados en estados en disputa.
Los expertos en ley electoral han planteado preguntas sobre si estos sorteos violan la ley federal que prohíbe pagar a otros para votar. Musk, por su parte, ha presentado el dinero como un premio y como ganancias por trabajar como portavoz del grupo.
Krasner ha advertido que aún podría considerar la posibilidad de presentar cargos penales, ya que tiene la tarea de proteger al público tanto de loterías ilegales como de “interferencias en la integridad de las elecciones”.
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