Gustavo Riviello Jiménez, un hombre de 63 años, se encontraba atrapado en su hogar, incapaz de moverse debido a una infección bacteriana en la piel y su avanzado sobrepeso. Durante una semana, este valiente luchador solicitó desesperadamente ayuda a las autoridades, pero se le negó el apoyo que tanto necesitaba.
La erisipela, una infección cutánea grave, había generado una úlcera en los pies de Gustavo, dejándolo postrado en cama y con un peso aproximado de 150 kilos. A pesar de sus repetidos llamados a la Cruz Roja y los Bomberos Municipales, se le informó que debía levantarse por sus propios medios, algo que resultaba imposible debido a su delicado estado de salud.
Finalmente, gracias a la intervención de su hermano Julio César y el Ayuntamiento, Gustavo fue trasladado al IMSS 57 para recibir la atención médica que tanto necesitaba. En una operación de rescate que involucró a cinco personas, el sexagenario, quien trabajó como operador de grúas en Astilleros de Veracruz, fue bajado con cuidado desde el segundo piso de su hogar y colocado en una camilla para ser transportado a la unidad de auxilio.
Esta conmovedora historia de superación y resiliencia nos recuerda la importancia de la empatía y la solidaridad en momentos de crisis. Mientras Gustavo lucha por recuperar su salud, N24 se compromete a seguir informando sobre casos como este, que nos inspiran a ser mejores ciudadanos y a exigir un sistema de salud más inclusivo y accesible para todos.
