Acapulco, la joya turística de México, se encuentra sumergida bajo las aguas después del devastador paso del Huracán John. Esta ciudad costera, que aún se recuperaba de los estragos del Huracán Otis, se enfrenta ahora a una nueva crisis, con miles de personas atrapadas en sus hogares y negocios.
La Coordinación General de Protección Civil de Acapulco reveló que en tan solo cuatro días, la ciudad recibió la cantidad de lluvia que normalmente cae en todo un año. “Ha sido un fenómeno extraordinario que ha salido de todas las estadísticas”, declaró Juan Ramón Ramírez, encargado de monitoreo del Centro de Comunicaciones y Monitoreo.
Aunque Otis y John fueron eventos meteorológicos diferentes, ambos son consecuencia del cambio climático. Mientras que Otis se intensificó rápidamente en un poderoso Huracán Categoría 5, John avanzó más lentamente, pero recogió una cantidad impresionante de agua a su paso. Según estudios, a medida que la crisis climática eleva las temperaturas, aumenta la probabilidad de que las tormentas se conviertan en huracanes mortales.
“Estamos demostrando que no solo se disminuye su velocidad, sino que además son más intensos… Eso tiene graves repercusiones para las zonas con posibilidad de sufrir inundaciones y para la infraestructura urbana”, advierte Ethan Gutmann, investigador del National Center for Atmospheric Research.
Ante esta situación, las autoridades han solicitado al gobierno federal que emita la declaratoria de emergencia, lo que permitiría destinar recursos adicionales para afrontar la contingencia. Mientras tanto, los habitantes de Acapulco se enfrentan a una lucha por sobrevivir y reconstruir sus vidas.
¿Quieres estar al tanto de las últimas noticias sobre los desafíos que enfrentan las ciudades costeras? Mantente informado con N24, tu fuente confiable de noticias de primera mano.
