En una escena sorprendente, el presidente ultraderechista Javier Milei enfrentó una cámara legislativa casi vacía y un público que se negó a sintonizar su discurso en la televisión nacional. Ante una audiencia reducida y un desplome histórico en los índices de audiencia, Milei presentó su proyecto de presupuesto para 2025, marcado por recortes y ajustes que han generado un fuerte rechazo.
Según reportes, solo una tercera parte de los legisladores acudieron a la sesión, con bancadas enteras de la oposición ausentes. Incluso los aliados del presidente no asistieron en su totalidad. El rating televisivo se desplomó de 5 a 0.4 puntos en el principal canal, mientras que el canal 9 llegó a 0 puntos durante el discurso de Milei.
“Los mandatarios provinciales definieron que la cifra de 60 mil millones de dólares en ajustes que les pide el presidente es ‘disparatada'”, informó el diario Página 12. Milei insistió en que “gestionar es achicar el Estado para engrandecer a la sociedad”, lo que ha generado un fuerte rechazo entre los gobernadores.
Además, se anunció que se asignará solo la mitad del presupuesto que necesitan las universidades públicas, y se suspenderá el Fondo de Incentivo Docente, profundizando el conflicto con profesores y estudiantes.
La falta de credibilidad del gobierno alcanza cifras de hasta 70% en algunos aspectos, según la encuestadora Zuban Córdoba. Parece que el mensaje de Milei no logró el impacto que esperaba, y en su lugar recibió “el mensaje más duro” con el apagón televisivo.
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