En un llamado urgente a la acción, el Papa Francisco ha expresado su solidaridad con las miles de personas afectadas por la viruela del mono, una enfermedad infecciosa que se ha convertido en una emergencia sanitaria global.
“Deseo manifestar mi solidaridad con las miles de personas afectadas por la viruela del mono, que ya constituye una emergencia sanitaria global”, dijo el pontífice argentino tras el rezo del Ángelus dominical. El Papa instó a los gobiernos y a la industria privada a compartir la tecnología y los tratamientos disponibles para garantizar que todos reciban la asistencia médica adecuada.
La Organización Mundial de la Salud ha declarado el estado de alerta sanitaria a nivel internacional por esta enfermedad, que puede provocar inflamación de ganglios y erupciones cutáneas dolorosas o con picor, entre ellas granos o ampollas. En África, se han contabilizado casi 21 mil 500 casos de mpox y 591 muertes desde el 1 de enero en trece países, según datos de la Unión Africana.
El Papa expresó su cercanía con las iglesias locales y aseguró que reza por los contagiados, especialmente por los de países “tan golpeados” como la República Democrática del Congo. “Animo a los gobiernos y a las industrias privadas a compartir la tecnología y los tratamientos disponibles para que a nadie falte una adecuada asistencia médica”, dijo.
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