Todos los que integran la realeza británica deben seguir estrictas normas de etiqueta: la vestimenta debe ser formal, sin escotes y la mayoría del tiempo las mujeres son vistas con vestidos o conjuntos de falda. Pero Meghan Markle, antes de casarse con el príncipe Harry y llegar a la realeza, tenía un estilo totalmente opuesto.
Aunque, como actriz, estaba acostumbrada a usar vestidos muy coquetos en las alfombras rojas, en su vida cotidiana siempre recurría a prendas básicas y salvadoras como lo son los pantalones de mezclilla y las camisas.
Meghan Markle derrocha sensualidad en leggings y mini top haciendo yoga Esta vestimenta jamás la habría aceptado la reina Isabel
Look de Meghan Markle con pantalón roto y camisa blanca
Así era común verla en la calle: con pantalones tipo skinny con detalles rotos y camisas de colores neutros, siendo la blanca la más fácil de combinar ya que aporta presencia y elegancia de forma inmediata y sin mucho esfuerzo.
En los dos años que estuvo en la monarquía representando a la Corona en eventos oficiales, jamás se le vio usar este tipo de atuendos. Aunque sí una adaptación, ya que en una ocasión uso un look compuesto por un pantalón de vestir negro, con camisa blanca, muy cómodo para trabajar e igual manteniendo la elegancia como duquesa de Sussex que es.
El uso de prendas de vestir ajustadas como los leggings no está permitido en la monarquía, pero Meghan Markle siempre supo combinarlas en su vida anterior a la realeza de forma exquisita, causal y muy coqueta. En una sesión de fotos, se vio hermosa con los leggings y camisa blanca.
Tanto Meghan Markle como el príncipe Harry que una vida llena de lujos no aporta felicidad. En su caso, vivían agobiados por la prensa y la intromisión en su privacidad, por lo que tomaron la decisión más difícil de todas: retirarse de la realeza para irse a vivir a Estados Unidos bajo la más estricta privacidad.
